Decía Mateo Alemán en su obra Guzmán de Alfarache que "Quien miente, engaña, y quien engaña, miente" y eso viene a colación porque si el aumento del IVA lo aplican los mismos a quienes se le secaba la boca proclamando a los cuatro vientos su ineficacia (cuando quien lo proponía era el adversario político, claro), o mentían entonces o mienten ahora y, en cualquiera de los supuestos, engaña. Sin más rodeos.
Acudiendo a la filosofía de la cuenta de la vieja, si lo que se necesita es incentivar la confianza del ciudadano para que repunte el consumo, no parece acertado aumentar los precios, sino todo lo contrario.
También sin más vueltas. Y hasta aquí la parte abusiva.
¿Y la dejativa? Pues en ella hay que cederle el protagonismo al Ministro de Hacienda en sus declaraciones públicas a raíz de las que se deduce dejación de responsabilidades. Veamos. Si uno de los argumentos (?) para subir el IVA es que hay importantes bolsas de fraude en su recaudación, no hay que ser muy listo para concluir en que:
1.- Su obligación (que para eso es parte del gobierno) es luchar contra ese fraude antes de hacerme pagar más a mí, que no defraudo
2.- Si sube el porcentaje de IVA bajará la recaudación, como ya ha pasado en otr5os países que han realizado la misma maniobra, ya que disminuirá el consumo y aumentará el fraude.
| Mateo Alemán - Grabado de la época |
Seguimos pensando que uno de los ejemplos a seguir por nuestros dirigentes que, por cierto, han admitido públicamente (y no porque lo apuntara el Financial Times sino porque lo ha declarado el Presidente de Gobierno) que su objetivo es el de volver a ganar las próximas elecciones y no el bienestar de los españoles, es el de la buena gestión empresarial. Pero, claro, la excusa de la mayoría absoluta no da tiempo para instruirse.
Gran publicación, llena de mucho razonamiento. Esperemos que no se cumplan las peores previsiones de recaudación por a subida del IVA, sobretodo en cultura. Saludos
ResponderEliminarGracias por el comentario. De todas formas, lo peor de esta situación no es lo que, como apuntas, afecta, por ejemplo, al mundo de la cultura, ya que eso puede arreglarse con un mínimo de cordura, un mucho de voluntad y analizando lo que ocurre en el resto de Europa, a través de un simple cambio en el Reglamento del IVA. Lo peor es lo que no se ve, y entre otros aspectos:
Eliminar- la sensación que queda de que el defraudador obra con total impunidad o, según parece, con complacencia.
- el sentimiento de que se está legislando, no ya con vistas al bien comúnm, sino de manera que se incrementan agravios que no deberían existir
- la convicción de que quien debe encauzar los problemas se está mostrando como incompetente en la búsqueda de soluciones y arrogante en su aplicación.
- ...
Lamentablemente no son crìticas gratuitas: el Presidente del Gobierno ha dicho en su último acto de partido, en Galicia, que "no ve otra solución que subir el IVA".
Ante afirmación de tal calibre, surgen dos opciones: o es un artificio retórico para contentar a sus propios votantes, y en ese caso cabe pensar que miente, o realmente lo piensa, lo que resulta de una cerrazón alarmante, porque soluciones, hay.
Saludos y ánimo.