Lo que sigue es una ampliación y complementa lo que ya se dijo en agosto de 2019.
La historia de la música está llena de curiosidades alrededor de las versiones, los plagios y las adaptaciones. Todos tenemos en nuestra vida una canción que nos hace parar en seco, que convierte al resto del mundo en un escenario en el que el foco nos ilumina sólo a nosotros, que desgrana nota a nota la esencia de lo que somos. Además esta puede ser nuestra canción preferida o no, pero sí que es aquella que no necesitamos llevar a una isla desierta porque está grabada en los cromosomas de nuestro ADN. My Way (A mi manera) es una canción original francesa compuesta en 1967 por François, Gilles Thibaut y Jacques Revaux en la que, con el título de Comme d’habitude (Como de costumbre), Claude François, entonces en la cresta de la ola, se lamentaba de la ruptura sentimental con la cantante France Gall, y de la que Paul Anka aprovecha la música cambiando completamente la letra, práctica muy habitual en aquellos tiempos, para relanzar la carrera de un Sinatra en horas bajas, con 53 años, y que sentía que su carrera estaba estancada, que ya no vendía como antes, que el rock le estaba quitando espacio y que su voz no era tan poderosa; había decidido retirarse con el que sería su último álbum, con versiones de grupos como The Beatles y Simon y Garfunkel. La Voz, como lo llamaban en Estados Unidos, se lo hizo saber al canadiense Paul Anka, uno de sus pupilos, en una cena en Nueva York. Después, Anka fue a Francia casualmente y descubrió la canción; la letra no emocionaba mucho, pero la melodía tenía tanto poder que no se la pudo quitar de la cabeza por muchos días y por un dólar (!) compró los derechos. En un principio la canción tuvo una tibia acogida, pero con el paso del tiempo fue convirtiéndose en una de las imprescindibles en los conciertos de Sinatra y, quizás, la más importante de toda su trayectoria junto con New York, New York. Anka reescribió toda la letra en una noche de tormenta y, con Frank Sinatra en mente, cambió el relato que contaba la versión original. La nueva letra es un prodigio de cómo se puede sintetizar en cuatro minutos toda una filosofía de vida (debe ser por eso que hoy es la más popular en los funerales -pero también en los karaokes-). Según se va acercando su final el cantante echa un vistazo atrás y ve lo que ha sido y hecho. Ha cometido errores, no tantos como para mencionarlos, pero no se arrepiente porque hizo lo que consideraba que era su deber. Arriesgó más de lo que podía, pero apretó los dientes y no paró hasta que consiguió vencer. Y, aunque a veces las lágrimas no le dejan ver, ahora sabe la verdad, que una persona no mide su éxito por lo que tiene si no por no dejar por el camino su integridad; que no cuentan las veces que ha caído de rodillas, sino porque nunca ha dejado de levantarse; que su valía la demuestran las cicatrices de los golpes encajados y que sin embargo estos no le han hecho cambiar de vivir a su manera. La canción, con la nueva letra, la han cantado Elvis Presley, Nina Simone, Robbie Williams y decenas más, incluido los españoles Isabel Pantoja, Raphael o el mexicano Vicente Fernández, quienes hicieron versión en español, y Sinatra convivió con My Way hasta su muerte. Dicen que con el tiempo se cansó de la canción, pues sentía que era cursi y que no tenía la fuerza de otros de sus éxitos. En una entrevista en el año 2000, la hija de Sinatra, Tina, dijo: “Siempre pensó que la canción era egoísta y se mostraba indulgente. Nunca le gustó. Aunque esa canción se atascó en su vida y jamás pudo sacársela de encima.”, pero para el público era su número uno indiscutible y se lo pedía en todos los conciertos. La canción nos permite reflexionar sobre el eterno debate de si es primero la letra que la música o al revés; con el permiso de Paco ibáñez, Amancio Prada y tod@s los que han musicado poemas (la letra) de autores conocidos o no, My way un ejemplo (hay más) de que primero es la música sobre la que se pone la letra que se quiera, lo que no quiere decir cualquier letra, ya que llegan unas antes que otras.
Me gusta más Sinatra!!!!
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