En la Fuente Mágica.

La llamada Fuente mágica de Barcelona, situada al pie de la montaña de Montjuïc, se ha convertido en una de las atracciones más populares de la ciudad gracias a su exhibición de música, luz y color. Y, por supuesto, agua. Creada con motivo de la Exposición Universal de 1929 por el arquitecto, ingeniero y luminotécnico Carles Buigas, es el elemento principal del conjunto de cascadas y estanques que va desde el Museu Nacional d’Art de Catalunya hasta la plaza de Espanya. No fue hasta los años ochenta del siglo pasado que incorporó la música con diferentes colores y combinaciones de tonos mientras el agua iluminada empieza a bailar al ritmo de la melodía, desde melodías de Disney hasta música clásica, pasando por bandas sonoras y canciones de los años ochenta y noventa. Cabe destacar en el repertorio, especialmente, en lo que sería, casi, el himno olímpico "Barcelona", que fue interpretado por Freddie Mercury y la soprano catalana Montserrat Caballé en la propia fuente que, por los Juegos Olímpicos de Barcelona 92 se restauró completamente. Una de esas composiciones vistas/oídas que, en principio, sorprenden, identificada después de una búsqueda sonora, era No te olvides de mí, del primer disco (aunque, según dicen, no la mejor canción del mismo) de una tal Diana Navarro, cantante malagueña hija de pescadores (conocida ya, entrre otras cosas, por los duetos que ha hecho a lo largo de su carrera con María Dolores Pradera, Pablo Alborán y Sergio Dalma, entre otros), la copla de nuevo siglo, hermanada con la ópera de Maria Callas y la new age de Enya, el fado portugués y el folclore mediterráneo, la melodía norteafricana, el influjo oriental, y el flamenco, por supuesto. Flamenco, copla y zarzuela reunidos en una misma garganta. A juzgar por lo escuchado en la búsqueda, Diana es emoción cercana, familiar, pues todo pasa por su corazón; esa manera de entonar una pieza con el vello que se eriza en Mare Mía (en un disco posterior al de Montjuïc) procede de la admiración de una hija por su madre, es como cantar un Ave María pero, en vez de Schubert, de la propia Diana.

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